Problemas dentales a partir de los 50
Los problemas dentales se dan en todas las edades y esto se debe principalmente a una inadecuada higiene, consumo excesivo de azúcares, café y refrescos; además del terror que nos da ir a dentista para limpieza profunda ¿verdad?
Sin embargo después de los 50 los cambios hormonales que experimentamos afectan a la mucosa bucal, las encías y los huesos de la boca, que nos hacen padecer ciertos malestares.
¿A qué nos enfrentamos?
Caries: ¿Creen que las caries son cosa de niños? Pues la noticia es que pasados los 50, la tendencia es a la alta, éstas pueden desarrollarse en la superficie de los dientes, alrededor de amalgamas antiguas e incluso en la raíz de los dientes. Avanzan con mayor rapidez si no se atienden pronto y aumenta la posibilidad de pérdida de piezas.
Sequedad bucal: ¿Sienten con frecuencia que no producen suficiente saliva? ¿Sienten la lengua y la garganta resecas? Siempre hay que descartar algún tipo de trastorno (daño en los nervios), pero en general la falta de salivación puede deberse al uso de algunos medicamentos, así como la quimioterapia o radioterapia y enfermedades crónicas como la diabetes.
Inflamación de las encías (Periodontitis): Es una infección que causa hinchazón, enrojecimiento y sensibilidad de las encías. Puede ir de leve, con cierto dolor, sensibilidad y halitosis, hasta la muy grave que provoca pérdida de piezas por la destrucción del hueso que las sostienen. También puede causar un problema cardiaco.
Amontonamiento de dientes: A medida que envejecemos los dientes se van desplazando y se amontonan. Esto dificulta la limpieza y además de caries puede desgastarse el esmalte y fomentar el bruxismo, que consiste en rechinar o apretar los dientes.
Cancér bucal: Sí, también en la boca puede dar cáncer, sobre todo en personas fumadoras, hay que estar muy atentas en la aparición de bultos, manchas y úlceras y correr al dentista.
Prevención
Para tener una óptima salud dental es indispensable acudir con tu odontólogo por lo menos dos veces al año y seguir las normas básicas para dientes y boca sanos: lavado al menos 3 veces al día, hilo dental para remover residuos entre los dientes y algún buen enjuague.
Es importante también vigilar las encías, que no estén inflamadas o sangren; en caso de dientes flojos o problemas de articulación mandibular (trabar la quijada) acude de inmediato al dentista.
Si usas prótesis o aparatos bucales, deben estar en condiciones óptimas de higiene.
¡Cuidemos nuestra sonrisa!