Tengo un planner nuevo
Sus hojas están divididas en secciones: la Agenda de renglones marcados con horarios donde anotaré la cita con el dentista, el café con las amigas, el desayuno de negocios, la medicina que debo tomar y el día que debo pagar la renta.
A un costado de cada página tiene un gran rectángulo verde con el título Máximas prioridades, en el cual apuntaré con tinta indeleble las cosas que no puedo postergar: decir un «te quiero» sincero, abrazar a los míos, consentirme con un día de spa y el viaje de chicas con mi hija.
A la derecha, en el recuadro rosa de cosas Por hacer mi primera nota será: «No dejar de leer y escribir», por el placer de vivir vidas ajenas, por el gusto de crear y recrear la propia. Los nuevos proyectos y el camino para lograrlos tendrán un espacio en este apartado, los escribiré con los dedos llenos de entusiasmo y determinación.
En la zona de Notas me faltará espacio para dejar testimonio de los recuerdos que iré creando cuando realice un paseo inesperado, o conozca el restaurante de moda y no paré de reír por los momentos compartidos con amigos;. Haré la letra chiquita para que quepan las nuevas vivencias cuando asista a un concierto, lea un libro más o decida cambiar de estrategia para conseguir mis objetivos.
También hay un sitio para escribir llamado Sentimientos donde anotaré si comienzo el día con un humor endemoniado a causa del insomnio o cierro entusiasmada mi noche por un elogio hacia mi trabajo o mi persona. Habrá días que un garabato de «carita feliz» exprese mejor cómo me siento que cualquier palabra. En los días tristes dibujaré una nube oscura con un sol detrás peleando por ser protagonista, recordándome que la vida tiene sus claroscuros, que me voy a decepcionar de situaciones o personas y que no puedo controlar todo; pero nada es eterno, el sol seguirá saliendo.
Tengo un planner nuevo. Con los espacios en blanco para empezar a escribir una nueva historia con los caminos que andaré, los obstáculos que tendré que superar, las personas que hallaré en el trayecto, los errores que cometeré y los éxitos que alcanzaré.
Tengo un planner nuevo. Y con él doy por cerrado no sólo el ciclo del calendario sino también etapas personales. Algunas solamente cambiarán de dirección, otras, las dejo ir porque cumplieron su misión.
Seguiré en mi empeño por viajar ligera: sin cargas, sin hubieras; con el valor y la decisión para continuar avanzando y, siempre, siempre con agradecimiento por lo vivido y aprendido, pues en el peor de los casos como dice Cortázar:
«Nada está perdido si se tiene el valor de proclamar que todo está perdido y hay que empezar de nuevo»
Mi admiración y respeto, siempre me inspiras
Gracias gracias gracias
Gracias a ti. Abrazo fuerte