Primavera

El sábado por la mañana estaba planeando mi bonito, positivo y alentador post, hablando de la primavera, mi estación favorita del año. Esa en donde todo vuelve a la vida. De días cálidos y soleados, flores, verdes árboles. la oportunidad perfecta para renovarnos nosotros también. El tiempo perfecto para dejar atrás los momentos grises, de sacar todo lo viejo para que entre lo nuevo, aplicar el Principio del vacío.

Pero por la noche, un evento desafortunado, le dio un sentido triste a ese ciclo de muerte-renovación.

La mamá de uno de los mejores amigos de mi hijo, murió en un trágico accidente de paracaidísmo a los 43 años. A la mitad de su vida. Era su trabajo y algo salió mal.

Mi hijo y su amigo se conocen desde hace 15 años, cuando iniciaron la escuela secundaria, así que han compartido casi una vida. Atravesaron la adolescencia juntos, comenzaron su trance a la adultez. Han estado en todos los momentos difíciles que han atravesado cada uno y también han compartido todos los felices. Incluyendo la boda el año pasado donde mi hijo fue elegido padrino.

Justo hace 8 días anunció que se convertiría en padre .

Y así como en la estaciones del año, en todo en la vida, los ciclos se repiten y a veces puede ser muy doloroso, dejar ir para recibir.

Que en paz descanse y que su familia encuentre un pronto consuelo.